¿Cuál es la mejor prótesis para un aumento de pecho?

El aumento de pecho con prótesis es una de las cirugías más practicadas en el mundo. 1 de cada 4 intervenciones de cirugía estética es un aumento de pecho. En este capítulo de #corporesano para @lavanguardia explico los detalles de cada tipo de prótesis y por qué un buen cirujano debe escoger un tipo de prótesis u otra en función de las mamas de cada paciente y del resultado que se desee conseguir.

Actualmente el cirujano tiene una gran variedad de tipos de prótesis. Dispone de prótesis anatómicas, prótesis redondas, prótesis de mayor proyección, prótesis rugosas y prótesis lisas y cada una tiene unas características en función del resultado que se busque en el aumento de pecho.

La primera distinción entre las prótesis mamarias, consiste en de que están rellenas. Existen las prótesis de suero, que actualmente están prácticamente en desuso, debido a que pueden perder cantidad de contenido por el sello con el tiempo. También existen las prótesis de gel de silicona, donde el interior es un gel, que puede ser más o menos cohesivo en función de la firmeza de la prótesis que se busque.

La segunda cosa a tener en cuenta en una prótesis mamaria es su cubierta. Existen prótesis lisas donde la superficie es lisa, o las rugosas o texturizadas, que son las que actualmente más se utilizan, ya que esta textura hace que haya menor índice de complicaciones en contractura muscular o de endurecimiento de las prótesis.

Por último hay que tener en cuenta la forma del implante, que variará según la forma de la mama, más que del deseo de la paciente.  Existen las prótesis anatómicas, donde están más rellenas de la parte inferior que no de la parte superior, con lo que hacen una forma más de lagrima, pero también existen de diferentes proyecciones. Particularmente estas prótesis anatómica las utilizo en caso de mamas tuberosas, con forma más tubular, y que por tanto necesitan una mayor expansión del polo inferior para poder conseguir un resultado satisfactorio. También en mamas que tengan una distancia muy corta entre el borde inferior de la aureola y el surco submamario.

Las prótesis redondas las utilizo, por ejemplo las de perfil alto, en personas que quieran un polo superior muy lleno. En cambio en mujeres que quieran naturalidad en el polo superior, redondas ligeramente más rellenas de la parte inferior.