Las orejas de soplillo o “despegadas” es una malformación congénita muy frecuente, que afecta a un 5% de la población, que suele ocurrir por la falta de pliegue del cartílago en la zona del antehélix dando la apariencia de una oreja sumamente extendida y plana. Existen dos técnicas quirúrgicas para tratar las orejas de soplillo, la otoplastia y la técnica Earfold. La otoplastia es una sencilla técnica quirúrgica que consiste en realizar una incisión tras la oreja y aplicar una serie de puntos de sutura que corresponderían al antehélix, estructura de la cual carece la gente que presenta las orejas despegadas. Con estos puntos se forma este pliegue y se reduce la distancia entre la cabeza y la oreja. La técnica de Earfold, consiste en introducir un pequeño dispositivo metálico en el interior de la pinzando esta y formando así el pliegue, pero sin necesidad de realizar un corte tras la oreja.
